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Servirá para reforzar las capacidades del socio local y mantener a las familias
(Manos Unidas).- El pasado 6 de febrero, un fuerte terremoto afectó gravemente a la zona sur de Turquía y al norte de la vecina Siria.
En la ciudad siria de Alepo, el número de muertos se cuenta por millares y los destrozos son incalculables. Al no haber podido desescombrar muchos de los edificios derruidos, se teme que el número de muertos aumente de manera significativa.
Dos semanas después del seísmo, y con las operaciones de rescate suspendidas en su práctica totalidad, muchas personas permanecen todavía en las calles bajo las gélidas temperaturas del invierno.
Georges Sabé, marista azul en Siria: "El lunes 20 de febrero, la tierra volvió a temblar fuertemente, pues hubo un terremoto de 6'3 en Antioquía, a 80 km de Alepo. Fue algo que suscitó mucho miedo en la gente. Todos salieron a las calles y nosotros abrimos las puertas de noche para recibir a toda la gente posible: ancianos, jóvenes, enfermos... hasta casi 700 personas. Algunas durmieron compartiendo colchón, otras en el suelo, otras en sillas. Fue una noche muy dura, ya que el miedo está tomando posesión en el corazón y en la mente de la gente y de los niños. Seguro que vuestra oración y vuestra amistad nos ayudan a servir mejor a la gente"
Nada más producirse el terremoto, nuestro socio local, los hermanos Maristas Azules de Alepo abrieron las puertas de sus instalaciones para socorrer a las personas que se habían quedado sin cobijo.En poco tiempo, llegaron a tener acogidas a más de mil personas. Con sus modestas capacidades, distribuyeron bocadillos y algunas mantas para pasar las primeras noches.
A día de hoy, los Maristas Azules acogen a casi 100 familias, lo que suponen más de 500 personas que necesitan que se les proporcionen colchones, mantas, leche y pañales para los bebés y comida diaria.
Para afrontar esta iniciativa, los Maristas han contado con el apoyo de Manos Unidas.
A los pocos días del seísmo, nuestra entidad ya estaba colaborando con nuestros socios locales en Siria.
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