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"Acabamos de escapar de la muerte": Asaltan la residencia del obispo de Uvira, en República Democrática del Congo
El M23, a las puertas de la ciudad congoleña
El obispo de Uvira ha sido víctima de un robo el 20 de febrero, según ha informado la diócesis de esta ciudad de Kivu del Sur, una región afectada por la ofensiva del grupo armado M23
Tres soldados de las FARDC (Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo), vestidos con uniforme y que hablaban en tshiluba, lengua hablada en el centro-oeste del país, irrumpieron en el recinto de la diócesis
"Nos apuntaron a todos con sus armas y nos obligaron a tirarnos al suelo junto con el obispo. Nos robaron dinero, teléfonos y otras pertenencias, y luego nos encerraron en nuestras habitaciones"
Este no es un caso aislado. Se han reportado otros saqueos perpetrados por soldados en Uvira, donde el M23 está ahora a las puertas. Un indicio más del desmoronamiento del ejército regular ante el avance rebelde
(Agencia Fides).- El obispo de Uvira ha sido víctima de un robo el 20 de febrero, según ha informado la diócesis de esta ciudad de Kivu del Sur, una región afectada por la ofensiva del grupo armado M23.
«Nosotros, Su Excelencia Monseñor Sébastien Joseph Muyengo Mulombe, obispo de Uvira, y los sacerdotes padre Ricardo Mukuninwa y padre Bernard Kalolero, acabamos de escapar de la muerte esta mañana a las 8:30 en la sede episcopal de Uvira», señala un comunicado firmado por el padre Ricardo.
«Tres soldados de las FARDC (Fuerzas Armadas de la República Democrática del Congo), vestidos con uniforme y que hablaban en tshiluba, irrumpieron en el recinto de la diócesis. Primero amenazaron al guardián, el señor Mwamba, y luego al cocinero, el señor Jean. Salí a su encuentro para preguntarles por la situación, pero nos apuntaron a todos con sus armas y nos obligaron a tirarnos al suelo junto con el obispo. Nos robaron dinero, teléfonos y otras pertenencias, y luego nos encerraron en nuestras habitaciones, amenazándonos con matarnos al menor movimiento mientras registraban toda la casa».
"Nos apuntaron a todos con sus armas y nos obligaron a tirarnos al suelo junto con el obispo. Nos robaron dinero, teléfonos y otras pertenencias, y luego nos encerraron en nuestras habitaciones"
«Gloria a Dios, finalmente se marcharon. Poco después, las hermanas misioneras de Jesús Emmanuel llegaron a nuestra casa, sin saber lo sucedido, y así pudimos compartir lo ocurrido. Si intentan localizarnos por teléfono, no podemos responder», concluye la nota dirigida a los fieles.
El tshiluba es una lengua hablada en Kasai Occidental y Kasai Oriental, dos provincias del centro-oeste de la RDC. Esto sugiere que los responsables del robo al obispo de Uvira, situado al este de la RDC, podrían ser soldados del ejército regular procedentes de esas regiones.
"Un indicio más del desmoronamiento del ejército regular ante el avance rebelde, que por el momento parece imparable"
Este no es un caso aislado. Se han reportado otros saqueos perpetrados por soldados en Uvira, donde el M23 está ahora a las puertas, así como en ciudades conquistadas anteriormente por la guerrilla pro ruandesa. Un indicio más del desmoronamiento del ejército regular ante el avance rebelde, que por el momento parece imparable.
